La atracción entre estos nativos es un hecho, ya que cada uno tiene aquello que al otro le hace falta y, por ende, las vidas de ambos se convertirán en instancias más placenteras y productivas una vez que junten sus esfuerzos para formar una vida en común.
Aspectos positivos.
Sexualidad: esta combinación lleva a vivir una sexualidad completa, ya que estará provista de ternura, sensualidad, atenciones y mucho cuidado por el otro. Vivirán el sexo sin presiones de tiempo ni de excesivas ganas de innovar. Entre los dos hallarán un punto medio que será su zona de confort, de la que no querrán salir.
Concretar los proyectos: hasta el momento Piscis es un signo que deja todo por el camino, pero Tauro no permitirá que siga desperdiciando su tiempo y su dinero en estudios que nunca termina, así que lo ayudará a convertirse en una persona con la entereza suficiente para afrontar sus responsabilidades.
Ternura: el trato cotidiano estará impregnado de una dulce ternura que hará que el vínculo entre ambos se vuelva cada día más íntimo y cercano.
Aspectos negativos.
Obstinación: la mutabilidad del pez se chocará de frente con la intransigencia de Tauro. Cuando este último muestre su imposibilidad para ceder, para aceptar la opinión del otro y para dar libertad a su amante, Piscis se decepcionará.
Divagación: la falta de coherencia y lógica de Piscis puede llegar a atentar contra una relación en la que una de las partes, Tauro, se basa en la más pura razón para resolver los asuntos del día a día.
Distracción: a Tauro le costará mucho lidiar con la falta de concentración de un signo que vive en la luna. Piscis necesitará conectarse más con la tierra y con los asuntos terrenales. Es posible que deba dejar la espiritualidad y la fantasía para los momentos de ocio y meditación.
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